The Machine

Necesitamos algo que se acople y encienda los motores de ésta sociedad.

Observé el desarrollo de otras latitudes y comprendí que hacia el espacio nunca vamos a volar, salvo si llegamos a establecer un parámetro de respeto para con El Imperio. También, catedrales monumentales ya no construimos; no obstante, la visión de un futuro dogmático, está plasmado en el epicentro de la Cuna de la Patria.

Nuestra educación es la que tenemos y los insignes deben retornar para entregar lo mejor de sí (¿Wenceslao Casares?), si es que su consigna es Chile Primero. No como pregonan los agoreros que se ufanan de mantener una estabilidad, con dualidad de cambio, en su momento menos preciso.

Bravo, Felipe Miranda.

Una pregunta: ¿esos centros estarán dentro o fuera de los establecimientos? Para generar dinámicas y atracciones hacia y desde los centros ¿qué modelo educativo será considerado como benchmark?

Pienso en el día en que le digamos al mundo que Chile comenzó a caminar, no corriendo pero si moviéndose.

Ahora entiendo el por qué de las aprensiones de F.F. para con los imperios del mundo: Sin lugar a dudas debemos esperar que los faroles del cosmos –mundano obviamente- iluminen sus campos de acción y nosotros evaluar cual es nuestra mejor opción.

Fijate en Chile, primero.