Tenemos que alejar, lo más rápido posible, a los educandos en formación digital de los operadores mundiales y nacionales sin control. El mercado liberalizado, en el interior de la educación (EE. UU. es un ejemplo de formación), solamente hace estragos y nos deja con unos cuantos que pueden hacer, inventar o reordena el desarrollo en las economías radicadas en las TIC’s.
Si los empresarios se mueven en ciclos económicos y empresariales, tendrían un semillero proyectado mucho antes de esos veinte años indicados por usted. Sin embargo, la panacea en esta sociedad ha sido cooptarse por la vía de la astucia y no por la de la “porboactividad”. Se desplazan hacia otras sociedades y economías queriendo replicarlas y conceden autoridad de sentencia a individuos que no se adentran en nuestras miserias.
Claro que hay que educar y para ello debemos tener centros de adiestramiento y acopio; acelerados al máximo y mantenidos con sendas inversiones que sobrepasen a los Efectos de Comercio para provocar bonos soberanos del mayor calaje. Si no se ve de esta entelequia forma, la mirada será aún más extensa difusa y confusa.
Bueno mi estimado líder, como usted dijo: nadie se atreve a decir el porque del desastre en la educación y, a veces, sale mejor no haber llegado a ser ministro de la cartera; la cabeza rueda tanto por abrir y no abrir la boca.
Fijate.cl
Héctor Samuel Quijada Olguín
Chileprimerista, Maipú.
PD: Me fijé que ya tenemos espacio virtual en la cuna de la patria.
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