Para el año XX deberíamos tener en pleno funcionamiento, en las corporaciones dómine, sendas unidades de decantación de procesos educativos digitalizados. Ya en el año 2005 se observó fusionar la biblioteca con el laboratorio de computación.
Como se formula en el blog http://piamarta.blogspot.com la tecnología deberá estar de lleno en funciones para el año XX. Tanto las demandas como los requerimientos de esta unidad deben estar en constante evolución y manutención. La administración es clave para mantener una observación “in situ” y el equipamiento debería tener el carácter de renovable para mantener vigencia con las capacidades y evoluciones de la tecnología.
La observación belicista que se tiene del emplazamiento de estas unidades, es para darle una connotación única e inminente, para que la educación tenga una oportunidad de entregarnos mentes adecuadas para el año XX. Dado que la digitalización es una de las máximas en el mundo tecnológico y esto ha desbordado en todas las actividades; el modelo de instrucción y manipulación de la información educacional tiene que corregirse al máximo y obedecer a los cambios que ya están corrigiendo la economía planetaria.
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